Usar chanclas en exceso en verano puede provocar dolor en el talón
El uso excesivo de las chanclas durante el verano puede ocasionar fascitis plantar, una inflamación del tejido interno que recubre la musculatura de la planta del pie y que resulta en un intenso dolor en el talón al caminar o estar de pie, según el Ilustre Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía (COPOAN). Esta lesión puede ser incapacitante e incluso afectar la alineación corporal y el bienestar general de las personas.
Posibles consecuencias y otros riesgos para los pies en verano
El abuso de las chanclas no es el único factor que puede causar problemas en los pies durante el verano. La exposición constante de los pies puede llevar a problemas como ampollas, hongos, quemaduras, dermatitis, reacciones alérgicas y queratosis actínica.
Recomendaciones para cuidar los pies en verano
Para preservar los pies durante el verano, los podólogos andaluces sugieren:
– Utilizar calzado fresco y transpirable con una suela sólida y flexible que sujete bien el pie.
– Aplicar crema solar para proteger los pies de los rayos UV.
– Mantener los pies bien hidratados con crema de urea.
– Prestar atención al sudor de los pies, ya que la humedad y el calor pueden facilitar el crecimiento de hongos y bacterias.
– Lavarse los pies diariamente y secarlos correctamente, prestando especial atención a la limpieza entre los dedos y debajo de las uñas.
Humedad vs. Hidratación
Es importante diferenciar entre humedad e hidratación de los pies. Mientras que la humedad se produce por el sudor o por mantener los pies mojados durante mucho tiempo y puede causar diversas patologías, la hidratación se logra con cremas que nutren la piel y la mantienen saludable.
Atención especial para diabéticos
Las personas con diabetes deben prestar especial atención a sus pies durante el verano, ya que tienen un mayor riesgo de infecciones severas y complicaciones debido a la proliferación de microbios en esta época del año.
¿Es recomendable andar descalzo en verano?
Los podólogos del COPOAN señalan que, para los niños pequeños, andar descalzos por entornos seguros como el césped o el suelo de una vivienda puede favorecer su desarrollo psicomotriz. Sin embargo, caminar descalzo durante largos períodos, especialmente en la playa, puede aumentar el riesgo de lesiones. Se recomienda usar calzado adecuado para los paseos en la playa, como escarpines o zapatos cómodos que brinden protección y soporte.
Por último, durante las vacaciones se aconseja elevar las piernas y descansar para aliviar el estrés y la fatiga, mejorar la circulación sanguínea y favorecer la reparación de los tejidos.
