La compra de tu vivienda será, probablemente, la decisión financiera más importante de tu vida adulta.

Para la mayoría de los mortales, se trata de un desembolso que acarrea consecuencias en nuestra economía durante muchos años. Como toda decisión financiera merece un análisis previo del sector, dado que todo influye: qué casa escojo, cómo la financio, dónde…

Evidentemente, la localización de la vivienda es de vital importancia. Pese a que esto depende en gran medida de tu estilo de vida, en el caso de tener libertad, hay que tener en mente que en España existen ciertas ciudades en las que el alquiler es una opción menos recomendable que la compra.

¿Cuál es la situación actual?

El mercado de la vivienda se mueve en consonancia a los ciclos de auge (comprendidos como los periodos en los que las economías llegan a los niveles más altos de producción y viceversa), generalmente oscilando en periodos de un rango de entre tres y siete años.

La razón por la que en fases expansivas la demanda de vivienda es mayor es bastante intuitiva; hay un mayor nivel de empleo, por lo que el número de personas dispuestas a invertir en una vivienda aumenta de manera considerable.

De la misma manera, las entidades financieras prestamistas de créditos hipotecarios tienden a relajar sus exigencias con respecto a los clientes que optan a la obtención de un crédito. Con todo esto, la demanda de viviendas crece considerablemente y consecuentemente los precios de las mismas se ven arrastrados al alza. Pues bien, actualmente comenzamos a entrar en esta fase.

Sin embargo, en esta línea, los precios de las viviendas se caracterizan por su menor flexibilidad. Es por esto que el precio de las viviendas apenas ha incrementado con respecto al año anterior, algo menos del 5%.

Si nos centramos en los alquileres de las grandes urbes, en el caso de Barcelona, al contrario que en otras Comunidades Autónomas, el incremento del precio ha sido muy superior, llegando a pagar casi un 40% más que hace cinco años. Pero hemos de aclarar: Barcelona es la ciudad española más cara para alquilar, por delante inclusive de la capital. Esto ha sido establecido por una amplia pluralidad de medios e informes (El País, La Vanguardia, ElPeriódico.com, y un largo etcétera).

Recapitulando: ahora mismo, con los números encima de la mesa, parece más fiable la compra. Esto no se aplica a todos los casos habidos y por haber, ya que, como indicamos al principio, es importante que el análisis sea individual y el veredicto puede cambiar en función de tu renta y del préstamo que se te facilite.

¿Qué se espera para el próximo año?

Decíamos que estábamos despegando en la fase de auge, pues bien, las previsiones, según presenta la Revista del sector inmobiliario, es una subida del mercado de la vivienda para los próximos 4 años en la compra, mientras que el alquiler se irá estabilizando.

Para el 2020, la construcción incrementará en un 28’4% aproximadamente, lo que equivale a unas 93.000 viviendas. ¿Mejor o peor que antes? Pues son cifras que duplican lo que hemos vivido entre 2015 y 2016, luego podemos afirmar que resulta positivo para la inyección de capital en la economía. Las mudanzas se incrementarán a la par de este nuevo auge de la vivienda. Sobre todo en las grandes ciudades, como las mudanzas en Barcelona, se necesitará de un servicio fiable y de calidad para llevarlas a acabo. En resumen, todos los datos se desvinculan de lo que leíamos en años anteriores sobre la crisis inmobiliaria, afortunadamente, dado que ese ciclo ha quedado atrás. Se prevén noticias cada vez más positivas, tanto al alquiler como a la compra, luego la respuesta queda pendiente únicamente a tus circunstancias personales.

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