Una nueva ley aborda el abuso sexual infantil sin violar la privacidad
Las organizaciones en defensa de los derechos digitales han logrado una victoria trascendental al adoptar la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior su posición respecto a la ley contra el abuso sexual infantil. Se ha eliminado la vigilancia masiva de las telecomunicaciones, su aspecto más polémico. Se ha logrado el equilibrio entre la protección de menores y los derechos civiles.
Protección digital de menores
Un pacto que se inclina hacia la mitigación del riesgo sin invadir el cifrado de las comunicaciones. La ley claramente establece que las autoridades judiciales podrán autorizar una orden para detectar y retirar contenido de explotación infantil..
Exclusión de monitoreo intrusivo
El acuerdo de esta normativa excluye que la detección afecte la privacidad de los ciudadanos. La propuesta original exigía que se rastreara de forma indiscriminada las comunicaciones encriptadas en busca de material pedófilo. Un giro meditado inyecta confianza en los sistemas de mensajería cifrada y alienta un clima de privacidad digital fortificada.
Obligaciones para mitigar riesgos
En función de la nueva legislación, los proveedores de internet tendrán la obligación de analizar si sus servicios conllevan riesgo de ser utilizados para la captación de menores. Además, la ley establece que ello recae en estas compañías. Los eurodiputados también sugieren una serie de normas como bloquear mensajes no solicitados y moderar la pornografía infantil.