OpenAI, bajo la lupa de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos
La compañía de inteligencia artificial, OpenAI, se encuentra ante su mayor desafío hasta la fecha. La Comisión Federal de Comercio (FTC) ha iniciado una investigación para determinar si OpenAI ha violado las leyes de protección al consumidor y ha comprometido los datos personales de los usuarios, según informa ‘The Washington Post’.
Según el diario, esta semana la agencia gubernamental envió una solicitud a OpenAI exigiéndoles que expliquen las medidas que toman para abordar los riesgos asociados con sus productos. Mientras tanto, el Congreso y la administración de Joe Biden están trabajando en una nueva legislación para regular la inteligencia artificial en Estados Unidos, lo cual obligaría a OpenAI a cumplir con las normativas de protección al consumidor. En caso de no hacerlo, esta empresa participada por Microsoft podría enfrentar multas y verse obligada a modificar el uso de los datos de los usuarios.
La controversia en torno a ChatGPT
ChatGPT es una plataforma de chatbot basada en grandes modelos de lenguaje, que utiliza inteligencia artificial para responder las preguntas de los usuarios basándose en la información que encuentra en Internet. Aunque puede ser convincente, este sistema también puede cometer errores. La FTC ha solicitado a OpenAI que informe sobre todas las quejas recibidas relacionadas con afirmaciones «falsas, engañosas, despectivas o perjudiciales» realizadas por este chatbot sobre otras personas. De esta manera, se busca determinar si se han llevado a cabo prácticas engañosas que hayan «dañado la reputación» de los consumidores.
Golpe a las aspiraciones de OpenAI
Con tan solo dos meses desde su lanzamiento público en noviembre, ChatGPT ha experimentado un gran aumento en popularidad, llegando a superar los 100.000 usuarios. Este crecimiento ha generado una guerra comercial entre gigantes tecnológicos como Microsoft, Google y Meta, quienes buscan ser los primeros en conquistar un mercado que promete beneficios multimillonarios.
Durante los últimos meses, el cofundador y CEO de OpenAI, Sam Altman, ha aprovechado la creciente influencia de ChatGPT para intentar influir en la regulación de la inteligencia artificial. Ha realizado una gira global que incluyó reuniones con líderes como Pedro Sánchez y Emmanuel Macron. La normativa de la Unión Europea, que ya ha sido aprobada, afectará directamente a ChatGPT. Sin embargo, en Estados Unidos se espera que la regulación llegue mucho más tarde. La investigación de la FTC podría obstaculizar los esfuerzos de Altman por marcar el rumbo de la industria.
Como se puede observar, OpenAI se encuentra frente a un panorama complicado mientras lidia con la investigación de la FTC y busca mantener su posición en el mercado de la inteligencia artificial. El futuro de ChatGPT y su influencia en la regulación de la IA aún está por determinarse.