Hay muchos tipos de manualidades que se pueden hacer en casa y una de ellas es la pintura en tela, con la cual es posible personalizar camisetas, pañuelos, bolsos, pantalones, etc., de una forma muy sencilla gracias a las pinturas que ofrecen en Silu.
Entre las marcas que tienen en esa tienda destaca la de pinturas Vallejo, todo un clásico en el mundo de la decoración de textiles y que se venden en decenas de colores distintos con el fin de que encontremos los que queremos usar.
¿Cómo se pintan textiles?
La pintura en tela es de las más fáciles que existe, más si empleamos una específica de calidad, pues aunque es cierto que podríamos emplear otro tipo, enseguida se rajaría y no resistiría bien los lavados.
Hay que preparar la prenda
El trabajo comienza preparando la tela y para eso la metemos a la lavadora, ya que a veces el tejido puede traer un tratamiento protector de la fábrica que hará que la pintura se quede en la superficie, algo que no nos conviene.
Ya con la tela lavada y seca, vamos a buscar una zona amplia, sin obstáculos en la que poder estirar la prenda sin que tenga arrugas, poniendo un cartón en el interior para que no manchemos la otra cara.
Este cartón también ayudará a moverla cuando la pintura aún no esté seca y evitará que la tela se arrugue al trabajar sobre ella.
Llega el momento de pintar
Ahora hay que pintar y aquí la creatividad es el límite. Para comenzar, recomendamos hacer un dibujo y comenzar rellenando los contornos, y después seguir con los interiores.
Siempre conviene que las pinceladas sean lo más cortas posibles, pues eso nos dará un mejor acabado que es lo que buscamos.
Al adquirir práctica ya podemos pintar sin dibujo, creándolo en el momento, haciendo composiciones abstractas, escribiendo mensajes, etc.
Hay que dejar que la pintura seque
Cuando terminamos de pintar hay que esperar. Lo mejor es no mover la tela del cartón durante un día y conviene dejar pasar dos, dependiendo de la humedad que haya en el ambiente.
Así, en verano se secará enseguida (aunque hay que esperar las 24 horas) y en esos días lluviosos del invierno tardará bastante más, por lo que habrá que alargar este periodo.
Una vez seco se puede planchar el reverso de la tela, lo que hace que el dibujo dure más tiempo, aunque antes de acercar la plancha hay que leer las instrucciones de la pintura, con el fin de comprobar si se puede usar.
El paso final es el lavado de la tela, el cual no es posible hacerlo de cualquier manera si queremos que el dibujo que hemos pintado perdure, por lo que hay que esperar al menos cinco días desde que terminamos.
Después, lo mejor es no utilizar la lavadora en el primer lavado, haciéndolo a mano y con un jabón suave como el que venden en las tiendas en forma de pastilla, ese que se ha utilizado toda la vida cuando se lavaba en la pila a mano.